Nuevo impulso para potenciar la Ruta de los Parques de la Patagonia
Carolina Cerda, Directora de Vinculación Comunitaria de Fundación Rewilding Chile.
Publicada en el diario El Pingüino - www.elpinguino.com
Los parques nacionales son una inversión y no un gasto. Generan puestos de trabajo y fomentan una cadena productiva relacionada con el turismo de naturaleza, prestación de servicios, alojamiento, alimentación y al mismo tiempo, ponen en valor la identidad de las comunidades. Esta convicción impulsa a diario nuestro trabajo, por lo que celebramos el anuncio de Corfo para crear el Programa Estratégico Mesoregional (PEM) Ruta de los Parques de la Patagonia, el cual dará continuidad al Programa Territorial Integrado Ruta de los Parques de la Patagonia de Corfo Los Lagos que llegó a su fin, luego de 3 años de ejecución.
Según un estudio de Waldrón del 2020, por cada dólar invertido en conservación hay un retorno de al menos cinco dólares. Las áreas protegidas impulsan la economía global y brindan beneficios no monetarios clave: la protección del 30% conduce a una mayor producción económica y que invertir en la preservación del medioambiente podría hacer crecer la economía mundial de un 4 a un 6% por año, de aquí al 2050.
La primera vez que presentamos esta visión territorial de la Ruta de los Parques de la Patagonia al Gobierno chileno, fue en el 2014, época en que predominaba la idea que la conservación se oponía al crecimiento. Posteriormente, Douglas Tompkins lanzó públicamente esta iniciativa en la cumbre de turismo aventura ATTA, que se realizó un año después, en la Región de los Lagos, proponiendo una estrategia integral para la Patagonia chilena basado en el desarrollo como consecuencia de la conservación.
Hoy, este recorrido cruza un tercio de Chile, conecta 17 parques nacionales, 60 comunidades aledañas y protege 11,8 millones de hectáreas y abarca 2.800 km. La Ruta de los Parques de la Patagonia es la columna vertebral de un modelo donde la protección de los ecosistemas van de la mano con el bienestar de las comunidades, quienes se transforman en guardianes de su territorio y desarrollan actividades económicas basados en la naturaleza y el turismo.
El PEM será una gran oportunidad para relevar la visión de la Ruta de los Parques de la Patagonia. Unificará e integrará la macrozona de la región de Los Lagos, Aysén y Magallanes. Permitirá establecer una hoja de ruta, donde se canalicen los esfuerzos de desarrollo territorial y entregará una sustento duradero a esta visión de conservación, donde no sólo se plantea como una acción urgente para contrarrestar las crisis de extinción de especies y el cambio climático, sino que también es una importante alternativa de desarrollo económico para las comunidades aledañas y para el país.
La primera vez que presentamos esta visión territorial de la Ruta de los Parques de la Patagonia al Gobierno chileno, fue en el 2014, época en que predominaba la idea que la conservación se oponía al crecimiento.
La primera vez que presentamos esta visión territorial de la Ruta de los Parques de la Patagonia al Gobierno chileno, fue en el 2014, época en que predominaba la idea que la conservación se oponía al crecimiento. Posteriormente, Douglas Tompkins lanzó públicamente esta iniciativa en la cumbre de turismo aventura ATTA, que se realizó un año después, en la Región de los Lagos, proponiendo una estrategia integral para la Patagonia chilena basado en el desarrollo como consecuencia de la conservación.
Hoy, este recorrido cruza un tercio de Chile, conecta 17 parques nacionales, 60 comunidades aledañas y protege 11,8 millones de hectáreas y abarca 2.800 km. La Ruta de los Parques de la Patagonia es la columna vertebral de un modelo donde la protección de los ecosistemas van de la mano con el bienestar de las comunidades, quienes se transforman en guardianes de su territorio y desarrollan actividades económicas basados en la naturaleza y el turismo.
El PEM será una gran oportunidad para relevar la visión de la Ruta de los Parques de la Patagonia. Unificará e integrará la macrozona de la región de Los Lagos, Aysén y Magallanes. Permitirá establecer una hoja de ruta, donde se canalicen los esfuerzos de desarrollo territorial y entregará una sustento duradero a esta visión de conservación, donde no sólo se plantea como una acción urgente para contrarrestar las crisis de extinción de especies y el cambio climático, sino que también es una importante alternativa de desarrollo económico para las comunidades aledañas y para el país.